Aplicar una o dos gotas detrás de la oreja y/o en el cuello. Otra forma de disfrutar de los beneficios del Attar es poner unas gotas en el cabello, como las maharani (esposas maharajá). La fragancia se difundirá sutilmente en el ambiente, como las hermosas trenzas floreadas de las mujeres del sur de la India. Si queremos beneficiarnos más de sus propiedades, también podemos aplicar el Attar en los puntos de pulsación: hueco detrás de las orejas, hueco debajo de la nuez, nuca y parte superior del cuello (en la raíz del cabello), cara interna del muñecas, parte interna de los codos, plexo solar, rodillas traseras, posiblemente arco. También se puede impregnar un pañuelo (pañuelo...) con unas gotas de Attar y respirar las emanaciones cuando se siente la necesidad (ansiedad, insomnio, dolores de cabeza, depresión...). Es interesante observar que los Attars tienen una fijación especialmente larga en los tejidos de fibras naturales. La ropa usada se remoja de forma natural y duradera sin tener que aplicar Attar directamente sobre ella (para evitar los riesgos de las tareas).